Ya está a punto de ver la luz mi último libro, ‘Desde la Trinchera. Artículos de economía sostenible‘. Se trata de una recopilación de artículos publicados en distintos medios de comunicación, sobre cómo se ha estado viviendo, desde el punto de vista de un empresario, el periodo de crisis económica que abarca desde 2008 hasta nuestros días. Hay reflexiones justificadas, preguntas sin contestar, críticas y autocríticas abiertas, y sobre todo, hay un punto de vista poco analizado en este tiempo… Cómo nos influye la situación económica sobrevenida en el día a día de los empresarios que arrancan todas las mañanas una nueva batalla para sobrevivir en mitad de una guerra de cifras macroeconómicas. Os dejo la introducción:
Desde la Trinchera
Con este título, tan apropiado para los tiempos convulsos que vive nuestra economía, y sin gastar mucha prosopopeya, pretendo dejar constancia de que los empresarios sí estamos en las trincheras de la economía real oyendo el silbido de las balas, y algunas de ellas dándote de lleno mediante la exacción continua de los rendimientos y el poco o nulo apoyo en la ardua tarea de emprender. Aun así, los verdaderos empresarios mantenemos la grandeza de ánimo, sean cuales sean las circunstancias, pues el optimismo es nuestra fuerza vital a la hora de encarar la cantidad de injusticias que afrontamos a diario, muy al contrario del que escribe a vuelapluma de economía, haciéndose pasar por gurú a través de sus escritos epistemológicos.
Es destacable, asimismo, que en España escriben y hablan de economía hasta los economistas…
Si los fisiócratas levantaran la cabeza verían que hemos tergiversado y pervertido entre todos el ‘laissez faire, laissez passer’ que ellos mismo predicaron. Se trata, por tanto, de cambiar el paradigma económico y volver a la racionalidad y los principios básicos de los que nunca debimos alejarnos.
Sea cual fuere el análisis postrero que hagamos de la crisis, nadie puede negar que no ha sido casual sino causal. Los principales artífices, sin duda, los políticos irresponsables practicantes de la prodigalidad, un sistema financiero más centrado en la especulación y poderosos lobbies mal intencionados. Esto corrobora que no ha existido una mano invisible que persiga armonizar los intereses de la persona, de la comunidad y maximizar así el bienestar general como promulgaba el padre de la ciencia económica Adam Smith. Por el contrario, lo que ha sucedido es la intervención (no la que propugnaba el bueno de Keynes) de muchas manos visibles que han provocado este marasmo económico sustentado en la mendacidad y el cortoplacismo. Sin embargo, las empresas y empresarios de bien somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario, y sin tener que exponernos a innecesarias ordalías.
Resta, pues, inferir correlaciones en cuanto al análisis y opiniones que vierto en este libro, sustentadas bajo el rigor empírico y factual de la escueta prosa de los artículos que he ido escribiendo durante este tiempo económico que me ha tocado vivir (2008/2011), donde todos hemos asistido a un festín pantagruélico de deuda sin parangón; de cualquier manera una época convulsa que ha provocado una muesca profunda en los anales de la historia económica. Incluso ya se habla de que Europa está sufriendo la peor crisis económica vivida después de la Segunda Guerra Mundial. Da miedo.
El hombre que ha sido el paradigma del emprendimiento, Steve Jobs, nos dijo que la mitad de lo que separa a los emprendedores exitosos de los que no triunfan es la perseverancia. Por este motivo este libro está dedicado a los miles de empresarios españoles ascéticos, que con su sacrificio volitivo están impeliendo la economía de nuestro país; pues el que piense que esto de emprender se hace sólo por dinero, se equivoca. Sí es cierto que hay muchos que dedican sus anhelos a la hora de crear riqueza sólo para sí, sin importar el valor compartido. A ésos no dedico este libro.
Ya para terminar citaré a Séneca cuando nos vino a decir que es feliz, por tanto, el que tiene un juicio recto; es feliz el que está contento con las circunstancias presentes, sean las que fueran, y es amigo de lo que tiene; es feliz aquél para quien la razón es lo que da valor a todas las cosas de su vida.
Francisco Barrionuevo
Presidente ejecutivo Novasoft
Presidente ejecutivo Fundación Manuel Alcántara